Diez lugares imperdibles en París

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1) Subir a la torre Eiffel

Al llegar a París, parte en dos la inmensidad del cielo. La torre Eiffel, símbolo de Francia, se ofrece desde todas partes. Con una altura de 324 m, esta torre de hierro pudelado domina el panorama desde la exposición universal de 1889.

Su construcción en dos años, dos meses y cinco días supuso una auténtica hazaña técnica y arquitectónica. Con una duración inicial prevista de tan solo 20 años, fueron su inmenso éxito popular y las experiencias científicas de Gustave Eiffel, que propuso emplearla como antena para las primeras transmisiones radiofónicas, lo la terminaron salvando. Aunque su construcción fue muy polémica, esta obra maestra acabó conquistando el corazón de los más escépticos. En la actualidad, es el escenario de numerosos acontecimientos de talla internacional.

La emoción comienza a sentirse ya desde la ascensión al monumento. Cada año, en torno a 7 millones de visitantes suben las tres plantas de la torre. Desde arriba, París ofrece una vista maravillosa. A medida que subimos, la ciudad se va revelando: comienzan a aparecer los monumentos, los coches se hacen más pequeños y el paisaje cambia.

Cada noche, la torre Eiffel resplandece. Para seguir disfrutando de este entorno mágico con la ciudad de la luz a sus pies, puede degustar los exquisitos platos de uno de los restaurantes de la torre, el 58 Tour Eiffel, en la primera planta, y el Jules Verne, en la segunda, o darse el capricho de saborear una copa de champán en la tercera planta.

Torre Eiffel: Campo de Marte, avenue Anatole France, 5. Todos los días de 9:30 a 23:00 y de 9:00 a 00:00 en verano.

2) Crucero por el Sena

Descubra la ciudad de la luz desde otro punto de vista en un crucero en un elegante barco típico. Una vez a bordo, déjese mecer apaciblemente entre los monumentos y los edificios que bordean el río y disfrute del paseo por el Sena.

Este río siempre ha sido la columna vertebral de París. Geográficamente es el eje central de la capital, consecuencia del papel que ha desempeñado en la historia de la ciudad. Muy pronto se valoró como un importante recurso territorial y económico, y por ello ha acompañado al desarrollo parisino. Los testimonios de este rico pasado determinan la ciudad actual.

Las vidrieras le permiten disfrutar totalmente de la vista del Sena y sus orillas. En una atmósfera ensoñadora, esta embarcación le permitirá compartir un momento perfecto con sus seres queridos. Incluso puede ser el momento perfecto para declarar o reafirmar su amor a su media naranja.

Descubra los numerosos cruceros por el Sena, tanto de día como de noche.

3) Hacer una visita de París en autobús

Para salir al encuentro de los lugares imprescindibles de París, recorrer la ciudad de la luz en autobús panorámico climatizado le permite descubrir su historia y sus grandes monumentos al tiempo que disfruta de la comodidad y los comentarios de la audioguía. Es el momento de admirar la plaza Vendôme, la Ópera de París, el Panteón, los Jardines de Luxemburgo, el museo d'Orsay, la plaza de la Concordia, los Campos Elíseos, el Arco de Triunfo o los Inválidos.

París invita a sus visitantes a realizar una excursión con sus amigos y familiares de día o de noche. Existen diversos circuitos de «Paris City Tours».

Con Paris City Vision :

Descubra los lugares turísticos más famosos de París con la visita Torre Eiffel, visita de París y crucero por el Sena. Entre los 324 m de la torre Eiffel, el crucero y la visita en autobús de lujo, podrá admirar París en todo su esplendor.

4) Disfrutar del París nocturno en el Moulin Rouge

El Moulin Rouge es el líder de los espectáculos de París, cuando no de toda Europa. Desde hace 126 años, el cabaret galo más legendario acoge a millones de espectadores que acuden para admirar el famoso cancán francés.

El Moulin Rouge es un lugar apreciado por artistas de todo el mundo. En este escenario tan mítico han actuado Mistinguett, Edith Piaf, Jean Gabin, Frank Sinatra, Liza Minnelli… Además, el cabaret más conocido del mundo también quedó inmortalizado por el pintor Henri de Toulouse-Lautrec, cuyos cuadros y carteles garantizaron al Moulin Rouge un reconocimiento rápido e internacional.

Se apagan las luces de la sala, se abre el telón… y cuando todo el elenco entra en escena, los espectadores quedan embriagados por la belleza de las Doriss Girls y las Doriss Dancers. Las 80 artistas, procedentes de todo el mundo, se engalanan con sus 1000 vestidos de plumas, de estrás y de lentejuelas elaborados por los sastres más importantes de París. El espectáculo también consta de magníficos decorados refulgentes y de diseños únicos realizados por artistas italianos. Es el momento de asistir a números excepcionales, incluso el regreso del acuario gigante, con una música original embriagadora. ¡Y cómo olvidar el famoso alzamiento de piernas de las chicas más hermosas del mundo!

Moulin Rouge: Boulevard de Clichy, 82. Dos espectáculos por la noche a las 21:00 y a las 23:00.

Con Paris City Vision :

¿Hace escala en París? Disfrute de la modalidad Visita de la ciudad en autobús, espectáculo en el Moulin Rouge con champán. Empezaremos descubriendo la ciudad de la luz y sus ineludibles enclaves, como la torre Eiffel, la avenida de los Campos Elíseos, la catedral de Notre Dame, el Puente Nuevo, el Petit y el Grand Palais, la Ópera, Montmartre, etc. Tras todo esto, disfrutará de una velada inolvidable en el cabaret más famoso del mundo acompañado de champán. Para acabar bien la noche, le acompañaremos de nuevo a su hotel o apartamento.

5) Admirar la catedral de Notre Dame de París

Notre Dame es una obra maestra de la arquitectura gótica francesa. Impulsada por el obispo Maurice de Sully, su construcción se prolongó durante más de dos siglos: desde comienzos del siglo XI hasta la primera mitad del siglo XIV. La catedral de Notre Dame de París ha sido testigo de numerosos acontecimientos de primer orden, como la llegada de la Santa Corona en 1239, el proceso de rehabilitación de Juana de Arco en 1456 o la coronación de Napoleón en 1804.

El monumento es conocido por su sublime equilibrio, aunque si se fija detenidamente, observará distintos detalles asimétricos que se introdujeron para romper la monotonía que promovía el gótico clásico.

Sus espectaculares rosetones, su tesoro de objetos preciosos y sus magníficos campanarios son los símbolos de esta obra maestra, que lamentablemente fue dañada por el enorme incendio que la golpeó el 15 de abril de 2019. Antes de esa fecha, una visita a las torres permitía el acceso a la Galerie des Chimères, antes de continuar el ascenso a la cima de la Torre Sur, donde uno podía encontrarse cara a cara con gárgolas aterradoras mientras disfrutaba de una vista impresionante de París.

Con más de veinte millones de visitantes al año, la catedral fue el monumento gratuito más visitado de París y de toda Europa y esperamos que su restauración nos permita pronto disfrutar de su belleza nuevamente. 

Notre Dame: Explanada de Notre Dame, 6, place de Jean-Paul II.

6) Visitar Montmartre

Punto cumbre de la capital, la colina de Montmartre es conocida por su basílica del Sagrado Corazón y por su vista panorámica de París. También descubrirá el carácter bizantino y romano de la basílica mientras disfruta del paisaje.

Deténgase en la animada plaza del Tertre en la que pintores, retratistas y caricaturistas trabajan al aire libre y exponen sus obras. Renoir y Van Gogh son dos magníficos ejemplos de aquellos que decidieron instalarse aquí.

Después de la visita «clásica», explore rincones más íntimos para sacar todo el provecho a la zona. Montmartre también es un barrio cultural y gastronómico con un encanto auténtico. Sus callejuelas en pendiente rodeadas de casas cubiertas de hiedra y sus escalinatas le conducirán a encantadoras plazuelas adoquinadas: este es el verdadero encanto de Montmartre. Piérdase en sus pintorescas calles, atraviese el romántico camino de Brouillards y visite la plaza de Clichy, donde descubrirá verdaderas joyas arquitectónicas.

Montmartre: Distrito 18, también conocido como distrito de la colina de Montmartre.

7) Visitar el museo del Louvre

La pirámide de vidrio situada en el Cour Napoleón se ha convertido rápidamente en el emblema del museo. La fortaleza de Philippe Auguste (siglo XIII) que la rodea se remodeló y se convirtió en residencia real durante varios siglos. Fue en 1793 cuando el Museo Central de las Artes, el primer museo nacional, abrió sus puertas. Año tras año, las colecciones se amplían y llenan el palacio cada vez más.

En la actualidad, la inmensidad del museo del Louvre es impresionante: se calcula que harían falta nueve meses para ver una a una todas sus obras. Además, es uno de los museos más grandes del mundo con una superficie de exposición de 73 000 m² en los que 38 000 obras se exhiben al público y otras 460 000 se conservan en el museo.

Las obras, de una riqueza excepcional, se distribuyen en ocho departamentos: Antigüedades orientales; Antigüedades egipcias; Antigüedades griegas, etruscas y romanas; Artes del Islam; Objetos de arte; Esculturas; Pinturas y Artes gráficas.

¿No le gustaría pasear frente a las obras maestras del Louvre? La Gioconda, la Venus de Milo y la Victoria de Samotracia son las preferidas de los visitantes. Entre las obras más conocidas, se encuentran también el escriba sentado, el Código de Hammurabi, la cabeza de una estatua femenina del tipo «ídolos de brazos cruzados», el diamante conocido como El Regente e incluso la impresionante colección de arte egipcio.

El Louvre: Rue de Rivoli, 99. Todos los días de 9:00 a 18:00 menos los martes (visitas nocturnas hasta las 21:45 los miércoles y los viernes).

Con Paris City Vision :

Descubra el museo del Louvre con una visita guiada sin Colas.

8) Cena romántica por el Sena

¿Hay algo más romántico que cenar en un crucero por la ciudad del amor eterno? Navegue lentamente entre los monumentos y los edificios parisinos a la puesta del sol; es el marco perfecto para compartir un maravilloso momento en pareja. París es el Montmartre de Charles Aznavour en La bohème, Le Jardin du Luxembourg de Joe Dassin o Hymne à l’amour de Edith Piaf. Con ocasión de una escapada romántica, saboree exquisitos platos al borde del agua con una copa de champán en mano.

¿Por qué no aprovechar este momento tan mágico rodeado de las luces de París para recordar a su pareja todos los momentos que ha pasado a su lado?

Con Paris City Vision :

Disfrute de una cena en un crucero en La Marina, un exquisito menú acompañado de champán y, de postre, un corazón de chocolate para compartir.

También ofrecemos una gama de cena cruceros durante las festividades de fin de año para celebrar la víspera de Año Nuevo en París.

9) Pasear a pie por el corazón de París

Para descubrir los tesoros ocultos de París, debe pasear por el corazón de la ciudad. Aunque vea la imagen de la dama de hierro desde cualquier parte, ¿sabía que está en muy buena compañía? Algunas de las joyas míticas de la capital se extienden a sus pies.

Para disfrutar de una vista fantástica de la torre Eiffel, preparé un típico bocadillo de jamón con mantequilla y una buena botella de vino para disfrutar de un pícnic a la francesa en el parque del Campo de Marte o en los Jardines del Trocadero.

No muy lejos de allí, un edificio de Jean Nouvel acoge el Museo del muelle Branly. Está dedicado a las artes y a las civilizaciones de África, Asia, Oceanía y América, y exhibe 4000 obras maestras de los distintos continentes.

Detrás de la torre Eiffel se encuentra el Palacio de los Inválidos. Luis XIV ordenó su construcción para acoger a los inválidos de sus ejércitos. En el complejo del Palacio de los inválidos destaca la cúpula de la catedral, dentro de la cual se encuentra la tumba de Napoleón, y el Museo del ejército, que invita a la reflexión.

Continuemos con nuestro camino. Desde luego, una estancia en París no es tal sin un paseo por la avenida más bonita del mundo, llena de tiendas de lujo, de cadenas multinacionales, cafeterías y cines, en cuyo centro se yergue el emblemático Arco de Triunfo.

Tampoco dude en llegar un poco más lejos y salir al encuentro del auténtico espíritu de la ciudad y de sus habitantes, y tomar un croissant en la terraza de una cafetería.

Descubra el Marais

Un paseo a pie por París pasa obligatoriamente por el Marais, un barrio histórico e indispensable de la ribera derecha que se ha convertido en uno de los más populares de la ciudad. Está repleto de lugares interesantes, si es un amante tanto del arte como de la gastronomía o las compras. Es el barrio preferido de los burgueses bohemios parisinos, aunque la población judía y la comunidad homosexual también han sabido dar un carácter fuerte a la vieja París. Día y noche sus calles adoquinadas bullen con el devenir de turistas y de parisinos tanto de este como de otros barrios. El éxito del Marais ha supuesto un increíble aumento del precio de los inmuebles, aunque ello no ha afectado al encanto que caracteriza al barrio.

Perderse en sus calles significa descubrir una arquitectura libre de la influencia de Haussmann, admirar palacetes propios del distrito 17, gozar con el olor a falafel y a libros antiguos, admirar el trabajo de artistas y jóvenes creadores, probar un cóctel en un bar moderno… En definitiva, una mezcla concentrada de lo que la capital ofrece a sus cinco sentidos; un caldo de placeres intangibles que quedarán mejor plasmados en sus recuerdos que en una postal o una fotografía.

10) Visitar la Ópera Garnier

Apolo sigue sosteniendo su lira de oro en lo más alto del Palacio Garnier. Los sucesivos volúmenes cumplen cada uno una función específica que permiten teatralizar la salida al espectáculo.

Esta obra maestra del neoclásico se la debemos al arquitecto Charles Garnier y se inauguró en 1875 como la nueva ópera del París haussmaniano a finales del Segundo Imperio. Fascinó a sus contemporáneos gracias a la riqueza, el eclecticismo y el ingenio de su plan arquitectónico y decorativo. El arquitecto contó con los mejores obreros de Francia, así como los mejores pintores y escultores de su época. Por primera vez en Francia, Charles García utilizó el mosaico decorativo para adornar las bóvedas de la galería del Grand Foyer. Esta obra se convirtió en la más importante de los teatros de estilo italiano.

Si le interesa, debe saber que el precio de los ballets, las óperas, los conciertos y los recitales de la Ópera Garnier no son tan disparatados.

Ópera Garnier: Rue Scribe, 8. Todos los días de 10:00 a 17:00 (18:00 en verano).

Con Paris City Vision :

Una visita guiada a pie de París del Palacio Real a la Ópera Garnier le permitirá descubrir, además de la Ópera Garnier, otros lugares insólitos como los pasajes secretos de la ciudad o la vista panorámica de París desde la azotea de las Galeries Lafayette.

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